Calle Alfalfa, 4 - 41004 Sevilla Horario: Lunes-Jueves 12:30-16:30 y 20:00-00:00 | Viernes-Domingo: 12:30-00:00 +34 954 227 362

La Bodega de la Alfalfa Tradición y Vanguardia en una cocina con
productos de máxima calidad, siempre al mejor servicio.
Nuestra Carta

NuestraHistoria

Desde el barrio más alto de Sevilla

“En el número 4 de la calle Alfalfa en 1985, abrió sus puertas un templo sevillano de la manzanilla y los vinos de Sanlúcar y Jerez siempre acompañados de mariscos y chacinas. Su andadura se inicia de manos de José Delgado hasta que en abril de 2005 pasa su administración al hostelero sevillano Pepe Gutiérrez, el cual acopla la taberna existente al estilo que dota a los establecimientos que dirige y resurge de sus cenizas.”

Tras la profunda reforma de 2012, la fisonomía cambia por completo, dando un aire y sabor de bodega moderna y atractiva donde predominan la decoración en hierro, la madera tallada y una mejor acústica. El local, por tanto, ofrece 160 metros de un ambiente acogedor y cálido, predominando en él los vinos nacionales acogidos en una carta de ingenioso diseño.

 

NuestraFilosofía

LAS MEJORES MATERIAS PRIMAS AL SERVICIO DE LA AUTÉNTICA COCINA SEVILLANA
Calidad y profesionalidad en el servicio, con una clara vocación de ofrecer lo mejor de nuestra cocina a sevillanos y visitantes, participando de una experiencia inolvidable, en un entorno inmejorable.

Con una cocina similar a la de sus «establecimientos hermanos» (Bodega Dos de Mayo, Casa la Viuda y El Sanedrín) los guisos tradicionales se disputan con las tapas de temporadas, clásicas y vanguardistas, por llenar la mesa de nuestros comensales.


NuestraBodega

Fruto de una profunda reforma que se realizó bajo la supervisión del conocido decorador Antonio Lebrero, en la Bodega de la Alfalfa predomina la madera, algo que provoca que el local evoque claramente a una bodega tradicional sevillana. Asimismo, podemos apreciar medallones con las diferentes variedades de uva en las paredes, relieves en madera en la barra y botelleros que otorgan gran protagonismo al mundo del vino.

Por todo ello, se ha convertido en un lugar de encuentro elegante, cálido y acogedor en pleno corazón de la Alfalfa